martes, 13 de abril de 2010

Se desata una guerra


.- No me sale una idea buena, de hecho esta es la tercera vez que intento escribir algo, desperté con sueño y no tengo claro ni lo que ahora quiero...
Tenemos tan pocas preocupaciones, se desata una guerra cuando comenzamos a crecer aun me acuerdo cuando era pequeña y mis preocupaciones eran mínimas comía, jugaba, dormía y respiraba, de hecho si hoy en día respiro simplemente porque el aíres es gratis de lo contrario estaría muerta. Cambian tantas cosas, se desata una guerra y no entiendo nada, se trata de crecer y de tomar otras responsabilidades que todos los días van pesando un poquito mas, esa guerra contigo misma porque comienzas a crecer y a moldear lo que vas a ser en un futuro muy cercano y hay tantas cosas que no te gustan y que quieres cambiar, pero a la vez te quieres quedar tal cual estás no quieres cambiar absolutamente nada porque te da miedo cruzar esa puerta que hace que muchas cosas cambien, un par de historias y tanta fantasía que no entiendes de donde salió, recuerdas lo mínimo la más afectivo, lo más justo y apreciado el resto no entiendes de donde salió. Antes de que se desatara esta guerra solías tener una vida normal no muchos esfuerzos, no muchas necesidades, ahora te das cuenta que necesitas esforzarte todos los días un poco más si quieres ser alguien el día de mañana. Las personas de 17 años no tienen muchas preocupaciones, muchas necesidades, de hecho solo tenemos un deber que es estudiar y por ley dormir, comer y flojear. Muchas veces desatamos actitudes que a los demás les molesta partiendo por nuestros padres ellos solo tienen el deseo de que sus hijos sean alguien el día de mañana pero eso a nostros nos asusta y ellos no lo entienden, porque el mantenernos en una caja de cuatro por cuatro no nos permite saber que hay en el exterior hasta que lo exploramos sin saber por donde comenzar. Los adultos tienen más preocupaciones, una familia, constan del dinero que no hace la felicidad pero que puede solucionar muchas cosas, constan de recuerdos y de ver como los hijos les devuelven todo lo que ellos se han esforzado para que nosotros podamos estudiar, en cambio nosotros solamente nos esforzamos lo mínimo, algunos tienen una pareja, otros en cambio no, vivimos del que hacer y el que no hacer, no tenemos ideas claras, no más preocupaciones, vivimos del dinero de los padres y aun así seguimos sintiendo que algo nos falta, pero no entendemos porque si lo tenemos todo, pues, realmente no lo tenemos todo si tú hoy vistes, comes y tienes un lugar donde vivir es a costo de tus papas nosotros no tenemos nada el auto y la casa no son de tú propiedad porque tú no lo haz pagado, todas las cosas que dices ser tuyas incluyendo tú ropa no lo son porque tú aun no te das el lujo de trabajar y pagar a costa de eso tus propias cosas para que realmente sean de tú propiedad, algún día cuando trabajes lo entenderás. Muchas veces los adultos suelen juzgarnos porque no recuerdan que ellos también tuvieron nuestra edad y fueron adolescentes en proceso de crecimiento...

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